¿Sabías que las plantas pueden defenderse?
Como tú bien sabes, las plantas no pueden correr para escapar de sus enemigos, que casi siempre son los animales que se las comen.
Sin embargo, las plantas han desarrollado curiosos instrumentos para defenderse. Hay plantas que tienen pelos, que son como agujas, para que los insectos no las chupen. Y otras que en esos pelos tienen unas sustancias que al rozar el cuerpo de los intrusos les producen picores y fuertes sensaciones de escozor.
Hay también otras plantas provistas de espinas, púas y aguijones, que en realidad actúan como puñales, espadas o lanzas.
Otras plantas tienen en su superficie unas sustancias pegajosas en las que los insectos se quedan pegados.
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